Desearía un sistema que me sincronizase la información que tengo en mi portátil, con la del PC del trabajo y que además pudiese acceder a ella desde cualquier lugar. Bueno todo no, al menos, la información más importante.
Dropbox es una buena opción: almacena los archivos en la nube y los sincroniza entre terminales. De forma que la informació está así en el cielo (la nube) como en la tierra (portátil, sobremesa...). Además, de forma sencilla. Se instala una carpeta en local, donde podemos arrastrar los elementos que queramos almacenar.
Dropbox se distribuye en modo Freemium con 2 Gb de capacidad y también en modo Premium para 5 y 100 Gb.
Instalarlo es fácil. Mira cómo:
Una de las características que hace grande a Dropbox es la posibilidad de compartir los archivos con otros usuarios de modo que cualquier actualización queda sincronizada ipso facto. Esta característica abre su mercado al uso corporativo. Tal es así que algunas empresas ya han decido apuntarse y gestionan su sistema de ficheros en la nube.
Sólo un inconveniente. Compartir con alguien que padezca el síndrome de Diógenes digital puede cargarse todas las virtudes de esta solución.
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