No hace demasiado tiempo moviamos ficheros en diskettes de la friolera de 1,44mb. Hoy en día ese tamaño lo tienen casi hasta nuestras notas de texto.
En la actualidad fotos, videos, música o casi cualquier otro archivo que se nos ocurra supera con creces ese tamaño y lo multiplica por diez.
Filemail es una buena solución para intecambiar archivos de una manera muy sencilla, ya que su interfaz es como la de cualquier correo electrónico.
La coña viene con las opciones avanzadas, ya que podremos determinar el número de veces que puede ser descargado y la cantidad de días que estará disponible para su descarga.
Todo esto en la versión freemium, que nos permite enviar ficheros de la nada despreciable cifra de 2gb. Si optamos por la versión premium por 9$ al mes podremos enviar hasta 10gb y proteger nuestras descargas con contraseñas.
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